lunes, 26 de octubre de 2015

Herramientas agronómicas en Olivo.

Se puede observar distintos manejos en predios contiguos, se visualizan diferencias en el manejo del riego, haciendo que el agua no llegue a la base del tronco, para ello se han construido bordos , lo suficientemente altos y en el otro todo por lo contrario, con suelo bien arenoso ambos , con  turnos de riego cada 17 días.

Se pueden observar plantas excesivamente grandes que necesitan de poda para bajar la producción a lugares más cercanos y cómodos,  eliminar algunas ramas que producen excesivo sombreado y sobre todo, fertilizar. Es típico que estos suelos tengan muy baja materia orgánica , baja CIC y en general pobres .


En el otro predio se observan planas con poco follaje, bien regado pero evidentemente con algunos problemas de fertilización y peligrosa llegada de agua a la base de la planta, todas medidas de manejo que facilitan una producción sustentable
En todos los casos, si bien el suelo es arenoso, para saber la realidad de cómo estamos regando y la necesidad de agua del monte, es imprescindible hacer un hueco con la pala y chequear la humedad a distinta profundidad, en este caso se comprobó que la humedad de suelo era muy buena hasta el metro de profundidad , aún con presencia de malezas en superficie que evapotranspiran y sacan agua de los primeros cm de suelo.
Hay que saber qué está pasando en mi primer metro de suelo, esto es fundamental tenerlo como práctica habitual.